El sol es importante para nuestra salud, ya que los rayos solares nos proporcionan vitamina D. La necesitamos, especialmente cuando atravesamos un invierno frío y oscuro. Por eso es genial recargarse en los cálidos rayos del sol durante los meses de verano.
Pero los rayos del sol también pueden causar daño. Por eso siempre debes proteger tu piel con un buen protector solar y usar productos de cuidado solar que hidraten y mantengan tu piel sana y hermosa.
Te contamos qué productos solares debes elegir para protegerte mejor de los rayos del sol. También te guiaremos sobre cómo elegir el aftersun adecuado en caso de que tu piel sufra daños por el sol.
Mucha gente te anima a usar protección solar todo el año, incluso en invierno. Como mínimo, siempre debes proteger tu piel con protector solar si el índice UV es 3 o más. Esto suele ocurrir ya desde abril.
El sol está en su punto más alto en el cielo entre las 12 pm y las 3 pm durante los meses de verano, por lo que es una buena idea permanecer en la sombra durante este tiempo.
Las quemaduras solares ocurren cuando tu piel se daña por los rayos del sol. Se puede manifestar como enrojecimiento, ardor e irritación de la piel afectada. Si tienes la piel sensible, también puedes desarrollar eccema solar, que es una erupción roja y picazón a menudo acompañada de pequeños bultos o ampollas en la piel.
Siempre debes evitar completamente el sol hasta que tu quemadura solar o eccema solar haya desaparecido para no agravar el problema de la piel. Siempre recuerda hidratar y cuidar tu piel en caso de accidente. Sigue leyendo más abajo mientras te guiamos a través del cuidado solar en 3 sencillos pasos.
1) Usa protector solar
Protege tu piel de los dañinos rayos del sol con un buen protector solar. Aplica protector solar de 15 a 30 minutos antes de salir al sol y elige el factor de protección solar adecuado. Si viajas a algún lugar donde el sol es más fuerte, deberías elegir un factor más alto que en tu país de origen. Por lo general, 15-30 SPF es suficiente, pero si tu piel es muy sensible, es mejor elegir un factor más alto.
2) Mantén tu protección solar durante todo el día
Recuerda aplicar protector solar varias veces al día. Esto es especialmente importante si nadas o sudas mucho. Una cantidad del tamaño de una mano es suficiente para todo el cuerpo, pero más es mejor que menos. Si no usas suficiente protección solar o con la frecuencia suficiente, corres el riesgo de terminar con una quemadura solar.
3) Hidratación, hidratación y más hidratación
Tu piel necesita mucha atención e hidratación después de un largo día bajo el sol. Usa un buen aftersun para evitar que tu piel se seque. El gel de Aloe Vera de Australian Bodycare proporciona mucha hidratación y mantiene tu piel bonita e hidratada después de tomar el sol.
Si el daño ya está hecho y has sufrido una quemadura solar, el gel de Aloe Vera también puede ser tu salvador. El gel de Aloe Vera no solo enfría e hidrata, sino que también tiene un fantástico efecto curativo en la piel, ayudándola a recuperarse más rápido de las quemaduras solares. El gel de Aloe Vera de Australian Bodycare también contiene Aceite de Árbol de Té, que mantiene la piel dañada limpia y libre de bacterias.
Es una buena idea poner el gel de Aloe Vera en el refrigerador durante media hora antes de aplicar el hidratante, para que el efecto refrescante del producto realmente se destaque. Esto es especialmente agradable si te has quemado.
Los rayos del sol son geniales, en la cantidad adecuada. Exagerar y dañar tu piel puede resultar en manchas de la edad, arrugas y pérdida de elasticidad. Así que siempre recuerda proteger tu piel con protector solar.
Si ya has tenido un accidente y estás buscando un buen aceite corporal para mejorar la apariencia de tu piel, considera nutrir e hidratar tu piel con Aceite Corporal, que contiene Aceite de Árbol de Té, Aceite de Almendras, Aceite de Girasol y Escualano. El Aceite Corporal tiene un efecto alisador y añade mucho brillo y nutrición a la piel seca.
El precio de comparación es el valor del paquete al comprar cada unidad por separado en lugar de adquirir el paquete completo.
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